Salimos a las 8 horas de Miti Miwiri tras recoger a Sofía y Joaõ, una pareja portuguesa que son mis compañeros de jornada. Hablan muy bien español y sin embargo me cuesta entender su portugués más que a los mozambiqueños. Son de Lisboa. Confirmo que hablan distinto.
Nuestro guía es un joven isleño, que tiene como misión conducirnos caminando hasta la isla de Quirimba. No es algo que pueda realizar un viajero por su cuenta, pues hay que conocer el camino, por supuesto no señalizado, y entender el funcionamiento y la actuación de las mareas en la zona.