La parada de las combis en el centro es una gran explanada sin asfaltar, como todas las estaciones de por aquí. Son las 11 horas y un absoluto caos de combis pegadas unas a otras sin orden ninguno y pitando continuamente es el escenario que me encuentro.

¿Y como encuentro la que busco, cuando en muchas no hay indicación de donde van? Pues preguntando! Pero se adelantan y son ellos quienes quieren saber donde voy y me remiten a la correcta. Por 5 rands, me montó en la combi rumbo a Mbare.

En el centro de Harare no encuentras ni un solo mercado, pero es empezar el camino hacia Mbare Musika y se suceden los mercados y mercadillos. Algunos se ven pobres, pero montones de vendedores y compradores los pueblan. Las calles están destrozadas, aquellas partes en las que podemos hablar de calles propiamente dichas. El barrio de Mbare parece que carece de infraestrucutras decentes, algunas fincas de viviendas se aprecian como destrozadas, hay personas que hacen fuegos en la calle, supongo que para cocinar. Pero la vida en la calle es frenética y fascinante, un hervidero de actividad.

Llegamos a la parada del mercado y me indican que me baje. La verdad no sé muy bien por donde tirar. Una chica de la combi me ve despistada y se ofrece a acompañarme hasta el mercado. Entramos por unas callejuelas y damos con él. De nuevo una explanada sin más infraestructura que un techado en una zona, cantidad de puestos esparcidos por el suelo, montones de personas moviéndose por los estrechos pasillos sorteando los productos que los vendedores ofrecen, gritos en shona llamando la atención de los compradores, barbaridad de vegetales y frutas frescos desparramados y otros perfectamente ordenados…así es el colorido de Mbare Masika Market.

Sobre precios, los productos que abundan son baratos, ¿veis estas cajas de tomates? Cada caja por 1$. Yo solo puedo comprar unos cuantos porque mañana me voy, así que consigo que me los vendan por unos rands. Venden también una especie de olivas que se toman crudas. Las podéis ver en la foto de abajo. Aquí les encantan, los compran por cubos. Me ofrecen una para probar pero no me convence nada. Ellos se ríen de la cara que pongo. Está muy amarga!

Luego encuentro una zona más organizada, con calles definidas y puestos de madera. Al final compro fruta y verdura. Les compraría más porque todo tiene una pinta estupenda, lo tienen tan arreglado y bien presentado! Y además es barato, por 1 $ puedes comprar 5 manzanas, y también por 1 $ una buena ristra de plátanos. Las manzanas aquí están todas buenísimas, todo tiene sabor de verdad. Y las zanahorias también.

A algunos vendedores no les gustan las fotos, siempre pregunto antes, pero otros posan encantados y luego quieren ver el resultado. La gente me sonríe continuamente y me pregunta mucho, algún comprador directamente me pide el número de teléfono. Yo me río por lo rápidos que son y se lo deniego educadamente. Como si se pudieran permitir muchas conferencias a España ;-).

La vuelta es más sencilla, solo que hay que esperar a que se llene la combi. De nuevo el mercado se extiende casi hasta el centro de la ciudad.

Una experiencia increíble, un lugar que hay que visitar para sentir el pulso de esta ciudad y del país. Mbare Musika Market…

Luego me voy con mis bolsas a la parada de donde salen los coches compartidos a Avondale y en un rato estoy en la guest-house. Harare está controlado, viajer@s 😉

Resumen datos prácticos

• En Four St Bus Terminal coger combi a Mbare Musika por 5 rands
• En Mbare la combi se coge en el mismo sitio que te dejan, y te devuelve a la terminal de Four St.