Lo primero que hice al amanecer en Vicfalls es buscar el Victoria Falls Hotel, que datando de 1904 es uno de los hoteles más antiguos de Zimbabwe. Intuía que me había dejado por ver algo importante el año pasado. No sabía lo que podía ofrecerme pero siendo todo el conjunto impactante por el lujerío, lo más espectacular sin duda es la vista, pues está abierto al Zambezi. La panorámica es impresionante. Impactante la vista frontal del puente de estructura de metálica: el Victoria Falls Bridge. A la derecha Zambia, a la izquierda, donde estamos: Zimbabwe. Desde este puente los que ansían generar mucha adrenalina, pueden realizar su salto, el famoso puenting que nosotros llamamos. Parece ser que con sus 111 metros es el tercer mayor salto del mundo.
A la izquierda del puente observo anonadada la nube de vapor de agua que emana de las maravillosas Mosi-oa-Tunya (el humo que truena), que conocemos por un nombre mucho menos sugerente: las cataratas Victoria. No las puedo ver pero las siento cerca y recuerdo ese rugido ensordecedor… y su tacto.
Vicfalls es una ciudad que nació por y para las cataratas. Es un lugar de oportunidades para los zimbabweses, que vienen de otras zonas del país, atraídos por su prosperidad, para conseguir un trabajo.
No hay circuito turístico que se precie, ni viajero que recorra el Sur de África que no tenga en Vicfalls parada obligada. La ciudad acoge turistas de todas las clases, y acorde a ello dispone de todas las tipologías de alojamiento. Pero hay muchos hoteles de lujo: el Victoria Falls Hotels (habitación doble en temporada alta 350 $), el Elephant Camp (ronda el mismo precio), el Victoria Safari Lodge con vistas al Zambezi Nacional Park, (habitación doble en temporada alta 230 $), etc.
Las principales atracciones de Vicfalls son la visita a las cataratas, que ya hice el año pasado y os reporté por aquí y los montones de actividades que ellas, el Zambezi y el Parque Natural ofrecen a los turistas. No me apunté ninguna, el rafting dicen que es muy cañero y la verdad tampoco me apetecía mucho. Preferí pasear, aprovechar la wi-fi gratis que me permiten en el Kingdom, descubrir nuevos sitios y charlar con Farai, mi amigo de Vicfalls. No fue difícil encontrarlo, siempre está en la calle, es su trabajo: buscar turistas y venderles actividades. Al parecer las cosas siguen igual en Vicfalls. Quedamos para cenar en la barbacoa de Invuvu, un bar en la calle principal, y luego tomar una cerveza en Shoestring, donde nos encontramos a un español muy majo que también viajaba por su cuenta. Y también conocí a Nerea, una sevillana afincada en Vicfalls. Quería cambiar de aires y decidió venir aquí, llegó en febrero y no tienen fecha de vuelta. Quiere montar un negocio de hacer abanicos con telas africanas, muy creativa ella. La chica está encantada por aquí, se lo pasa bomba.
Una tarde me fui a ver el sunset al Victoria Safari Lodge, uno de los hoteles arriba mencionados. Está a unos kilómetros de la ciudad. Te recibe un negro con los ropajes de no sé que tribu. Exclusivamente para guiris adinerados. Tiene una terraza con piscina y enfocada al Zambezi Nacional Park. Alucinante! Algunas habitaciones también dan aquí. Delante, una pequeña laguna pero sin animales a la vista.
Sin ser exactamente lo que vi (ya sabéis que los colores del sunset no son recogidos por las cámaras) algunas fotos son bonitas. A pesar de estar el cielo encapotado, las nubes también aportan su belleza.
Y aunque menos ostentosa y sin vistas espectaculares mi guest-house en Vicfalls, un lugar muy cool: VictoriaFalls Backpackers, los dueños son zimbabueses blancos, todo una novedad, y tienen su casa en la misma parcela, arriba de ella el dormitorio, y alrededor del jardín varias habitaciones.
He descubierto también este año que hay un Craft Market (mercado de artesanía) inmenso en Vicfalls, está un poco escondido pero di con él una mañana. Mejor dicho, uno de los vendedores me llevó hasta allí. ¡Madre mía, es inmenso! Y qué pocos turistas había! Uff, pobres vendedores, espero que por la tarde anime con la gente que ahora visita las cataratas. Si no fuera porque me queda más de un mes de viaje por delante hubiera comprado souvenirs, tienen montones de cosas, la mayor parte ideales tallas de animales en madera. Todos los animales me gustan, y como hay tanta oferta no debe ser difícil conseguir un buen precio. Les hubiera comprado algo a Antonio y Alfredo, estos vendedores tan majos. Y hasta me hubiera llevado este increíble hipo ;-).
RESUMEN DATOS PRÁCTICOS
Panorámica Victoria Falls Hotel:
- Permiten entrada y moverse libremente por dentro.
Atardecer en el Victoria Safari Lodge:
- Permiten entrada libre. Ni siquiera exigen consumir
- Transporte: Existen shuttles desde el hotel a la ciudad, frente a Oficina Información y turismo. Gratuitas. Un taxi son 5 $
- Muy cerca de Livingstone Avenue, detrás de la Post Office
- Oportunidad para comprar artesanía.
VictoriaFalls Backpackers
- Dormitorio 15 $ y habitación doble 40 $
- 15 minutos andando al centro. 1 taxi 2-3 $