Bajando a Marruecos

A Algeciras

00:01: Salida bus de Valencia con llegada a Algeciras a las 13:30 horas. No hay ni que calcular, son la intemerata de 13 horas y media, suerte que caigo al lado de Lola, una granadina muy maja, charlamos hasta rendirnos al sueño y por la mañana nos levantamos, mejor dicho despertamos, y seguimos hablando de unas cosas y otras, tiene un novio en Argentina, así que va y viene con frecuencia.

8:30 Granada, ella se baja y tengo asiento entero para mi. He dormido mucho pero sigo dormitando, se hace llevadero el camino, llegamos a la Línea de la Concepción, a la derecha el peñón de Gibraltar, espectacular estructura.

A Ceuta

13:00 Llego a las taquillas de los Ferrys, no los recordaba así para nada, está todo como muy impecable, en la cola conozco a Mariló, es ceutí y va y viene con frecuencia a la península pues según me dice está malita y la tratan en Sevilla, algo de la vejiga que no acaban de averiguar qué es pero arrastra mucho dolor. Ahora, nadie lo diría porque la tía tiene una vitalidad que no veas y un deje andaluz tremendo. A mi se me hace complicado lo de Ceuta y Melilla, España en África, no sé, es tan raro. Le pregunto mucho, ella es nacida en Ceuta, se siente totalmente española, le encanta Ceuta, y de Marruecos, me dice que no viaja mucho por allí, salir de Ceuta hacia el sur se le antoja poco atractivo.

Los musulmanes que viven en Ceuta (el 45 % de la población ceutí) son particulares según me cuenta, no le gustan mucho, es como que se creen con un estatus especial y desprecian incluso a sus congéneres del resto de Marruecos. A tenor de lo que leo parece que no es la única que piensa así (Una consejera ceutí: ‘Los musulmanes no se levantan a buscar trabajo’). Una tierra española en África… en una misma ciudad dos culturas, dos economías, dos grandes religiones, dos mentalidades bien diferentes, en fin, dos mundos en un puñado de metros…. todo un hervidero de sentimientos, un milagro de convivencia.

Mariló insiste en que me dejan en la parada del bus que va hacia la frontera, en la Avenida González Tablas. Acaba de venir a recogerla su marido, nos hemos contado la vida, sobre todo ella ;-), es cañerísima! Nos despedimos rápidamente pues me paran detrás del bus que he de coger, lo poco que he visto de la ciudad me ha recordado a España, o incluso la he visto más limpia, algunos edificios bonitos, rehabilitados, una luz africana…El bus español, nuevo, confortable y con aire acondicionado rozando el frío y por los ocupantes diríase que estoy en Marruecos.

Dentro escuchando conversaciones en árabe, viendo mayoritariamente mujeres con pañuelo y por la ventana calles con nombre español y negocios con títulos castellanos… no puede ser más delirante.

Cruce de fronteras

Me cambio de sitio para no molestar con la mochila y me siento al lado de Shamira. Una decisión muy acertada, increíble mujer, más bien niña, porque tiene 25 años, aunque parece más ya que es muy espabilada. Habla un español graciosísimo, dice algunos tacos, otras cosas me cuesta más comprenderla, hay frases que no le pillo una, pero nos entendemos a la perfección. Me dice que va a Tetuán, así que ya tengo guía y ella es una estupenda cicerone. Bajamos del bus, enfrente la frontera, me dice que va a cambiar dinero, el típico hombre del cambio, el mismo al que las guías que he leído recomiendan no recurrir porque la policía te puede requisar el dinero. Yo miro, y a un lado y a otro hay policía, varios agentes, yo la única con apariencia totalmente no marroquí, le digo a Shamira si no va a ser peligroso, ella tiene claro que no, que no pasa nada, madre mía, vamos allá, cierto que he vivido situaciones similares o peores, pero cada una tiene su cosa. El hombre ofrece muy buen cambio, lo propio del mercado negro ;-), así que por 1 € 11,10 dirham. Me confirma que es buen dinero, anda que yo pregunto cada cosa….

Shamira me conduce por la frontera, ella no tiene que hacer ningún trámite pues pasa todos los días a España para luego volver a Marruecos, yo en cambio sí. Un sol abrasador pero los que van en vehículo lo tienen peor, no se desplazan ni un ápice, qué desespero. Shamira me dice que ella tiene que venir a las 5 de la mañana porque luego se pone imposible de la gente que entra y sale. Trabaja en casa de una familia española 4 días a la semana, les limpia y arregla el hogar, no tiene marido ni niños y no quiere oír hablar de casarse.

A Tetuán

Ya en Marruecos nos acercamos a la parada de los grandtaxis, los taxis compartidos, casi todos mercedes centenerarios. Nos ofrecen enseguida coche a Xauen, pregunto precio y dicen que 50 €. Ni hablar, es carísimo, ya lo advierte la guía, que mejor ir a Tetuan y coger allí autobús a Xauen. Lo comento con Shamira y decimos que no. Al poco, otro también nos ofrece Xauen, Shamira intenta hablar con ellos para negociar un precio compartido, pero parece que no llegan a nada, es en árabe y no entiendo pero de repente la cosa se nos va de las manos, empiezan a gritarse, viene el que primero me había ofrecido lo de Xauen y parece que le riñen a Shamira, ella contesta fuerte, pero madre mía la que le está cayendo… Le digo que lo deje que me voy con ella a Tetuán, avanzamos hacia los otros coches, y aun amenazan con llamar a la policia, eso lo han dicho en español, yo les contesto que de qué nos van a acusar, de no ir a Xauen?…En fin, que salimos por piernas, ella está flipada, le echan en cara que ayude a una extranjera y no a los suyos, un absurdo porque no hubiera cogido el transporte igualmente. Nos montamos en el primer coche a Tetuán, en 40 minutos nos plantamos allí, ella me invita a su casa y lo dice de corazón, no puedo ahora pero a la vuelta la contacto. Es un ángel.

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A Xauen

Me dejan en la estación de Tetuan. Veréis lo fácil que es montar un pollo aquí, llego a la estación voy a la parte de las taquillas, enseguida los típicos vendedores deambulando y dando gritos Xauen, Xauen, Tánger, Tánger, me acerco al de Xauen le pregunto hora de salida y me remite a una taquilla, allí me informan de que sale a las 17 horas, el precio son 20 dirham (1,8 €) y 1,5 horas de trayecto que serán 2 h. ;-). Son 15:45 horas e intento ver si hay algún otro bus que sale antes, avanzo por la zona de venta y miro los carteles, todos en árabe, ni siquiera en francés, un chaval me ve perdida y me pregunta, le digo lo que busco y llama a uno de los vendedores de billetes que deambula por la sala. Me dice que sí que a Xauen va un bus a las 17 horas, me confirma que es el mismo que me habían dicho y el único a esa hora. Voy a la taquilla y los dos vendedores detrás, lío montado porque ¿quien cobra la comisión de mi billete ;-)? Los dejo discutiendo y me voy a buscar un sitio donde esperar, subo al restaurante y me reencuentro con establecimientos de comida con humo y luego con las letrinas africanas. 

Al bajar a buscar el bus no hay manera de localizar el de Chauen, existen vías pero no las utilizan, algunos autobuses con rótulos pero todos en árabe, otros ni eso, pocos hablan francés o español en la estación, y es Tetuán, colonia española hasta 1956. Por un momento pienso que lo pierdo porque no hay manera de encontrarlo, un marroquí me dice que coge el mismo y que hay que esperar, tanto que se harta y vuelve a las taquillas, yo le sigo, el de la taquilla llama por teléfono al chófer para preguntarle donde está, me parto..ni ellos se aclaran, y nos acompaña a buscarlo por la ristra de buses aparcados en el semicírculo del parking. El bus es un horno, hemos perdido la sensación de entrar a un vehículo caliente y que siga caliente porque enseguida encendemos el aire acondicionado o movemos, pero aquí no, esperamos y esperamos, unos minutos que duran horas y sin encender el aire… Y no hay ventanas, el abanico que agito con desesperación no me hace nada, casi que me exaspera, el resto de pasajeros tranquilos, parece que ni sudan. Insufrible…

DSC_0913A mi lado se sienta Mohamed, un hombre mayor, de edad incalculable, me pregunta si fumo (hachis, se presupone). Él por supuesto, también si busco un hombre marroquí…no se me estará insinuando, no puede ser, jajaja, es simpático y me invento marido. Empezamos a mover, por el camino las vistas de Tetuán.

En Casa del Río

Al llegar a Xauen cojo taxi y por 15 dirham me deja en la callecita de Casa del Río. En la puerta Yaman el chico a cargo de la casa me muestra la habitación y la casa. Lo primero que hago es decargar trastos, asearme y subir a la terraza, las vistas son espectaculares, ya veis…probablemente las mejores vistas de Xauen. Un largo viaje más que compensado viajeros…

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